El coche funebre donde trasladaran el cuerpo de la reina Isabel II fue diseñado por la monarca en conjunto con la Casa Real. Se trata de un jaguar con destalles Royal Claret y la cifra real de la monarca, según reseña el portal Robbreport.
El coche funebre de la Reina Isabel
Tal parece que la Reina dejó todo listo para este momento y fue parte del proceso creativo del vehículo. Su aporte incluyó la planificación y antes de fallecer aprobó la estética final, unas semanas antes de fallecer.
El coche fue usado por primera vez el miércoles pasado cuando llevaba el cuerpo de la reina desde el Palacio de Buckingham hasta el Westminster Hall de Londres.

Este modelo personalizado es exclusivo, con acabado Royal Claret. Tal como el resto de coches de Estado utilizados por la monarquía británica en actos oficiales.
Además, el coche tiene la cifra real de Isabel II y está dotado con amplias ventanas en la parte de atrás, lo que permitiría que el público pudiera ver y despedirse de su reina mientras el vehículo transitaba.
La reina falleció en su residencia de descanso de Balmoral en Escocia, por lo que el Jaguar no fue el primer vehículo en llevar sus retos como se tenía previsto. En primera instancia su ataúd fue transportado en una Mercedes-Benz, habilitada por la funeraria local William Purves.
Los restos de la monarca permanecerán en la capilla del Rey Jorge VI, junto a los de su esposo, el Príncipe Felipe, según sus deseos en vida.
Al igual que la Reina, el príncipe Felipe también ayudó con el diseño del coche que llevaría su ataúd. Para aquel momento, el también conocido como duque de Edimburgo, optó por un modelo de estilo más deportivo. A tono con su espíritu aventurero y de deportista, por lo que seleccionó un Land Rover Defender 130 Gun Bus.