Durante el día, el sol pega fuerte en la Reserva Ecológica de Cerro Grande, considerada una de las más secas del mundo. Pero en las noches, la situación cambia drásticamente. La temperatura desciende a niveles muy bajos y la niebla se apodera de la zona, es por esta razón que han optado por aprovechar este recurso, como un mecanismo para obtener el agua que emana de estas partículas presentes en la neblina. Se trata de un novedoso sistema conocido como atrapanieblas. Producen cerveza con agua de neblina.
Este, consiste en la colocación de un tipo de malla que tiene como fin, retener las gotas de agua que se dirigen a la tierra, las cuales se escurren por medio de un canal que las lleva a almacenar en mayores cantidades.
Así es el proceso para hacer cerveza con agua de neblina
Esta idea surgió de los propios habitantes de la zona, quienes a raíz de la sequía que predomina en el lugar, optaron por colocar mallas plásticas de alrededor de la Reserva Ecológica de Cerro Grande, ubicada en esta árez. Las mallas dispuestas de forma vertical atrapan la niebla proveniente del Océano Pacífico, a través de ellas, van cayendo gotas de agua al canal que conectaron a un estanque. En total, son recolectados 560 mil litros de agua a año.
El sistema ha permitido reforestar la Reserva Ecológica local. Mientras que el agua recolectada puede ser usada por los habitantes de la zona para ciertas actividades. Asimismo, han aprovechado el agua proveniente de los atrapanieblas para producir dos tipos de cerveza, Brown Ale y Scottish Ale. Una tiene toques de chocolate y café, mientras que la otra posee un sabor a caramelo y es más tostada.
El año pasado, lograron generar 80 mil litros de estas bebidas, por las cuales obtuvieron una ganancia de 186 mil dólares. El toque salado del agua proveniente de la neblina del Pacífico, habría marcado la diferencia. Por ahora, el reto que tienen es poder hacer ozonizar esta agua. Desean embotellarla y que la población pueda consumirla, sin que esto conlleve a riesgos para la salud.