La carne es un alimento rico en proteínas, hierro, zinc y vitaminas del grupo B. Además, aporta beneficios para la salud, siempre que se consuma con moderación y dentro de una dieta equilibrada. Sin embargo, no todas son iguales y existen diferencias en su calidad nutricional y en su impacto ambiental. Por eso, es importante saber elegir te contamos cuáles son las mejores carnes.
Según los expertos, las mejores carnes son las que tienen menos grasa saturada, menos colesterol y menos contaminantes. Estas son las llamadas carnes blancas, que proceden de animales como el pollo, el pavo, el conejo o el cerdo (solo la parte magra).
Son las mejores carnes porque son saludables
Ayudan a prevenir o controlar el sobrepeso, la obesidad y las enfermedades cardiovasculares. Además, favorecen el desarrollo muscular y la recuperación tras el ejercicio físico. Asimismo, fortalecen el sistema inmunológico y previenen las anemias, son más fáciles de digerir y de cocinar.
A su vez, los expertos recomiendan como las mejores carnes las blancas. Estas se pueden consumir entre 3 y 4 veces por semana, alternando con otras fuentes de proteína animal como el pescado, los huevos o los lácteos. Se recomienda elegir piezas frescas, ecológicas y de origen local, y evitar los procesados como los embutidos, las salchichas o los nuggets.
Por otro lado, ahora que sabes cuáles son las mejores carnes, es importante que tengas una idea de cuáles las peores. Son las que tienen más grasa saturada, más colesterol y más contaminantes. Estas son las llamadas carnes rojas, que proceden de animales como la vaca, el cordero o el caballo.
Las menos saludables
Así como están las mejores carnes, también existen las peores, lo son porque aumentan el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2 y algunos tipos de cáncer. Además, elevan los niveles de ácido úrico y pueden provocar gota o cálculos renales. También, ten en cuenta que son más difíciles de digerir y de cocinar.
Las carnes rojas se deben consumir con moderación, no más de una o dos veces por semana, y preferiblemente en pequeñas cantidades y acompañadas de verduras. Se recomienda elegir piezas magras, ecológicas y de origen local, y evitar los procesados como las hamburguesas, las salchichas o los patés.
En conclusión, las mejores carnes para comer son las blancas, que aportan proteínas de alta calidad y poca grasa. Las peores carnes son las rojas, que contienen más grasa saturada y colesterol. Para disfrutar de una alimentación sana y sostenible, se debe variar el consumo de carne con otros alimentos de origen vegetal o animal.
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