El monstruo del lago Ness, o Nessie, es una criatura legendaria que supuestamente habita en el lago Ness. Este es un profundo lago de agua dulce cerca de la ciudad de Inverness, en Escocia. Su existencia es uno de los misterios más populares y difundidos de la criptozoología, la ciencia que estudia a los animales cuya existencia no ha sido demostrada.
La leyenda del monstruo del lago Ness es muy antigua. Se remonta al siglo VI, cuando se dice que el santo irlandés Columba salvó a un hombre de ser atacado por un animal en el lago. Sin embargo, los avistamientos modernos comenzaron en 1933, cuando una pareja afirmó haber visto a una criatura enorme con el cuerpo de una ballena y el cuello de un camello. Desde entonces, muchas personas han reportado haber visto a Nessie o haber captado su imagen en fotografías o vídeos.
¿Es real el monstruo del lago Ness?
Sin embargo, la mayoría de las supuestas pruebas son falsas, borrosas o ambiguas. Algunos expertos sugieren que los testigos podrían confundir al supuesto monstruo del lago Ness con otros animales. Por ejemplo, focas, nutrias, aves acuáticas o troncos flotantes.
Otras teorías que quieren creer su existencia, afirman que el monstruo del lago Ness podría ser un plesiosaurio. También sugieren que puede ser un reptil marino prehistórico; un esturión, un pez gigante; un bagre, otro pez de gran tamaño; o un tiburón errante de Groenlandia.
Por otro lado, un estudio reciente de investigadores de Nueva Zelanda abre un nuevo canal de explicaciones al misterio. Los científicos analizaron el ADN de las muestras de agua del agua y descartaron la presencia de cualquier animal grande o desconocido. En su lugar, encontraron una gran cantidad de ADN de anguila, lo que les llevó a sugerir que el monstruo del lago Ness podría ser en realidad una anguila gigante.
Las anguilas son peces alargados que viven en agua dulce y salada. En el caso de las más jóvenes, migran desde el mar hasta los ríos y lagos europeos. Allí es donde crecen y se reproducen. Algunas especies pueden alcanzar hasta cuatro metros de longitud y 25 kilos de peso.
Evidencias y estudios
Los investigadores admitieron que no podían determinar el tamaño exacto de las anguilas del lago. Sin embargo, explicaron que tampoco podían descartar la posibilidad de que algunas fueran muy grandes. Esto podría explicar que fueran confundidas con el monstruo del lago Ness. Además, señalaron que las anguilas tienen un comportamiento esquivo y nocturno, lo que podría explicar por qué son difíciles de ver y fotografiar.
El estudio no pretende resolver definitivamente el enigma del monstruo del lago Ness. Por el contrario, quiere esclarecer y profundizar el conocimiento sobre la biodiversidad del lago en cuestión. Los científicos reconocieron que la leyenda del monstruo es parte del encanto y la cultura del lugar, y que muchas personas seguirán creyendo en su existencia o buscando nuevas evidencias.
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