El Lockheed SR-71, conocido como «Blackbird», realizó su vuelo por primera vez en diciembre de 1964. Desde entonces, ninguna otra aeronave logró batir el récord de velocidad que alcanzó este portento. Ni siquiera los jets privados de lujo más impresionantes del mundo.
Los registros que se tomaron durante los vuelos que realizó entre 1964 y 1998 marcan velocidades Mach de 3.32 (3 veces la velocidad del sonido). Esto no lo superó ni siquiera por el Boeing 747-400, que es el avión comercial más rápido actualmente, con una velocidad máxima de 0,092 Mach.
En realidad, el Lockheed SR-71 era un proyecto de alto secreto, pues es una aeronave que se diseñó especialmente como avión de reconocimiento estratégico de largo alcance. El objetivo de esto era lograr que ingresara a territorio enemigo sin ser detectado. De esa forma se podría compilar información y captar fotografías aéreas.
El origen del Lockheed SR-71
Y es que su diseño y fabricación se llevó a cabo en un contexto histórico complejo, justo en plena Guerra Fría. Por eso se usó constantemente para aproximarse a algunas zonas de la Unión Soviética, pero no lograron esta meta. Sin embargo, sí ejerció estas acciones en otros conflictos bélicos como la guerra en el Oriente Medio y Vietnam.
El Lockheed SR-71 posee tecnologías innovadoras de baja detectabilidad o invisibilidad. No obstante, eso no consiguió ocultarlo por completo de los radares propios de los controles de tráfico aéreo.
Es por ello que en varias ocasiones el Lockheed SR-71 fue repelido con municiones antiaéreas de largo alcance, pero logró escabullirse gracias a su capacidad para volar a altitudes inalcanzables para ese tipo de armamento.