El cuerpo humano es una máquina perfecta que a su vez tiene todo un ecosistema complejo que mantiene la salud y es conocido como la microbiota intestinal. Dentro de este ecosistema, los probióticos emergen como héroes microscópicos. Te preguntas ¿Por qué?, sencillo, son los que mantienen el equilibrio y el bienestar dentro del sistema digestivo.
Aunque parece poco probable que agentes tan pequeños puedan tener un papel tan importante, lo cierto es que los probióticos pueden mejorar la calidad de vida y brindar un correcto funcionamiento del intestino para una buena salud en general. Si quieres conocer más sobre este interesante microorganismo, entonces llegaste al lugar indicado porque vamos a explorar su importancia, beneficios y formas en las que puedes aprovecharlos.
¿Qué son los Probióticos?
Se pueden definir como microrganismos vivos y en ellos hay tanto bacterias como levaduras. Sin embargo, cuando se ingieren de forma correcta y en las cantidades adecuadas, traen grandes beneficios para el sistema digestivo. De forma natural se pueden encontrar en algunos alimentos fermentados, pero adicional, gracias a los avances de la medicina, también los puedes consumir en forma de suplementos.
Aunque son muy pequeños, en conjunto juegan como un ejército y ayudan a proporcionar un equilibrio en la flora intestinal. Además facilitan la digestión de los alimentos, ayudan a generan vitaminas esenciales para el cuerpo, mantienen las funciones intestinales normales y como si esto no fuese suficiente, los probióticos también protegen contra los patógenos, en otras palabras, invalidan las bacterias dañinas, o al menos reducen su acción.
Como ves, los probióticos son esenciales y algunas investigaciones incluso sugieren que pueden mejorar la recuperación de trastornos intestinales y estimular el sistema inmunitario. Sin embargo, esto todavía está en estudios y no hay evidencia demostrada.
Probióticos: ¿Una moda?
A pesar de que ha habido un creciente y extenso interés del público por los probióticos, sus acciones y beneficios no son nuevos. Sin embargo, de un tiempo a esta parte es que ha incrementado su fama para mejorar la salud más allá del sistema digestivo.
De hecho, algunas investigaciones que se adelantan parecen sugerir que los probióticos podrían incluso tener un impacto positivo en condiciones como la obesidad, problemas de colesterol, depresión y trastornos del sueño. Pero, es importante que tengas presente que por lo pronto, todos estos beneficios aún se está investigando y se requieren de más estudios experimentales sobre las diferentes cepas probióticas que pueden ser más efectivas para ciertas condiciones.
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Historia de los probióticos
A la fecha son conocidos por sus beneficios para la salud intestinal, pero tienen una historia fascinante que se remonta a prácticas de la medicina tradicional y descubrimientos científicos clave.
El término “probiótico” proviene del griego y significa “para la vida”. Fue utilizado por primera vez en 1965 para describir sustancias secretadas por un microorganismo que estimulan el crecimiento de otro. Sin embargo, en forma de descubrimiento científico, se le atribuye al microbiólogo ruso Elie Metchnikoff, quien a principios del siglo XX comenzó a hacer experimentos y observó que ciertas poblaciones balcánicas que consumían grandes cantidades de yogur tenían una esperanza de vida notablemente alta.
Fue entonces cuando el científico teorizó que los lactobacilos presentes en el yogur reducían la proliferación de bacterias nocivas en el intestino. Pese a los avances que adelantó Metchnikoff, fue Parker en 1974 que acuñó el término de la forma cómo lo conocemos hoy en día y se encargó de definir los probióticos como organismos y sustancias que contribuyen al equilibrio microbiano intestinal.
Orígenes en la Medicina Tradicional
Desde aquella época en la década del 74, las investigaciones no han parado, por el contrario han avanzado de manera significativa y también los científicos han podido identificar diversas cepas de probióticos, así como sus posibles potenciales en pro de la salud en general, no solo la intestinal.
Los probióticos se han convertido en un campo de estudio prometedor en la medicina moderna, con un creciente cuerpo de evidencia que respalda su uso terapéutico. Ahora, en el caso del uso de alimentos fermentados que contienen probióticos de forma natural, es una práctica ancestral.
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Diversas culturas observaron que el consumo de estos alimentos contribuye a la salud digestiva y al bienestar general. Por ejemplo, en la medicina tradicional persa, se creía que la longevidad de Abraham se debía al consumo de leche ácida. Además, Plinio el Viejo, un historiador romano, recomendaba productos lácteos fermentados para tratar la gastroenteritis.
Beneficios extendidos de los Probióticos
Los probióticos están el cuerpo porque tienen una misión que es la de promover un ambiente intestinal saludable y esto lo logran al suprimir crecimiento de bacterias dañinas, manteniendo a raya infecciones y enfermedades. Al mismo tiempo facilitan la descomposición de los alimentos y la absorción de nutrientes, lo que puede mejorar la digestión y aliviar problemas como gases e inflamación.
También sirven para fortalecer el sistema inmunológico porque estimulan la producción de células de defensa. A su vez, algunas investigaciones apuntan a que pueden prevenir o aliviar condiciones como la colitis, el síndrome del intestino irritable, la enfermedad de Crohn y la inflamación intestinal.
Por otro lado, dentro de sus beneficios, hay algunos adelantos que sugieren que también tienen incidencia sobre la salud mental, porque ayudarían a reducir los niveles de estrés y mejorar el estado de ánimo.
Ejemplos de Cepas Probióticas y Sus Beneficios
Ahora que ya conoces algunos de sus beneficios más importantes y demostrados, debes saber que hay muchas cepas probióticas y cada una tiene sus beneficios asociados. Además, ten en cuenta que la eficacia de los probióticos tiende a variar de acuerdo a la cepa y a la condición de salud específica.
Lactobacillus acidophilus: Ayuda a digerir la lactosa y puede ser beneficioso para personas con intolerancia a este componente.
Bifidobacterium bifidum: Contribuye a la salud intestinal y puede ayudar a reducir la inflamación.
Saccharomyces boulardii: Se utiliza para tratar y prevenir la diarrea asociada a antibióticos y a infecciones del viajero.
Probióticos Fuentes Para Su ingesta Natural
Los probióticos se encuentran naturalmente en alimentos fermentados como el yogur, el kéfir, el chucrut, el kimchi y el miso, entre otros.
Yogur. Es un alimento probiótico producido a partir de leche fermentada. Contiene lactobacilos y bifidobacterias, que ayudan a mejorar la absorción de nutrientes y a mantener un intestino saludable. Eso sí, para que sea adecuado, lo mejor es que puedas optar por versiones sin azúcar y sin colorantes.
Kéfir. Esta bebida fermentada es rica en calcio y vitaminas del complejo B. Además, contiene más microorganismos beneficiosos que la leche, siendo especialmente útil para personas intolerantes a la lactosa.
Chucrut. Es col fermentada y también una excelente fuente de probióticos. Puedes incorporarlo como acompañamiento en tus comidas.
Miso. Se trata de una pasta fermentada a base de soja y otros granos. Se utiliza en la cocina asiática y es rico en probióticos.
Tempeh. Es otro producto de soja fermentada. También se le considera una buena fuente de proteínas y probióticos.
Vinagre de sidra de manzana. No solo es útil en la cocina, sino que también contiene probióticos beneficiosos.
Chocolate negro. Sí, incluso el chocolate negro puede contener probióticos, así que aprovecha sus beneficios y sabor. Pero no vayas por los más dulces y poco saludables, busca opciones con alto contenido de cacao.
Además, otros alimentos como manzanas, almendras, plátanos, cebollas y sopa de miso también son fuentes de probióticos. En este sentido, una dieta equilibrada y variada es clave para obtener una buena cantidad de probióticos.
Probióticos En Suplementos
Incorporar probióticos en la dieta es sencillo. Por ejemplo, puedes aumentar el consumo regular de alimentos fermentados. Ahora, si esto no es suficiente, entonces podrías complementar con suplementos probióticos.
Esta es una forma concentrada y accesible de consumir microorganismos beneficiosos que apoyan la salud intestinal y general. Por lo general, estos suplementos contienen cepas específicas de bacterias y levaduras que pueden ofrecer varios beneficios para la salud, como mejorar la digestión, fortalecer el sistema inmunológico y contribuir al bienestar mental.
Ten presente que al elegir un suplemento probiótico, es importante considerar la calidad y la eficacia de las cepas incluidas, así como las necesidades de salud individuales. Los expertos recomiendan buscar productos que hayan sido clínicamente estudiados y probados por terceros para garantizar su seguridad y efectividad. De cualquier modo, antes de tomar esta opción, lo mejor es que consultes con un profesional.
Los probióticos son más que una tendencia en el mundo de la nutrición; pueden tener muchos beneficios que no está de más aprovechar. Así que trata de conseguir el aporte natural con una
dieta rica en probióticos y prebióticos para tener un sistema digestivo saludable.
Lo anterior es solo un vistazo al tema de los probióticos, si quieres explorar más, hay muchos sitios en los que puedes obtener información confiable en el campo de la salud y nutrición como Mayoclinic, NatGeo, Menshealth, Elespanol, Lactoflora, Probioticosysalud, Clinicaalemana o Colon-irritable.
