La recomposición corporal se refiere a una modalidad entre la dieta y el entrenamiento físico. Se enfoca en la pérdida de peso y ganancia muscular al mismo tiempo, pero los resultados dependen directamente de los objetivos planteados.
Aun cuando parece contradictorio, sí es posible lograr perder grasa e incrementar la masa muscular de manera simultánea. PAra ello debe llevarse a cabo una serie de ejercicios y limitaciones alimenticias.
Para lograr la recomposición corporal es necesario calcular el gasto energético para que sea equiparable con la cantidad de energía que se consume, que debe ser la justa para evitar el aumento de peso. De hecho, puede ser un poco ventajoso calcular el consumo de menos alimento y gastar más energía de la que aporta.
Entrenamiento para la recomposición corporal
Para lograr una recomposición corporal adecuada la clave está en la alimentación y el entrenamiento, pues en el gimnasio se debe realizar ejercicios de fuerza para incrementar la musculatura, con repeticiones de intensidad baja a alta, así como cargando peso. Los principiantes deben hacer esto con moderación para evitar un resultado desfavorable.
Además, es necesario también llevar a cabo un entrenamiento cardiovascular, con ejercicios tipo HIIT, que entrenan la frecuencia cardíaca entre un 80 y un 95%. También es necesario hacer cardio con una intensidad baja.
En este punto, el déficit energético está presente, pero se logra de manera paulatina, pues se debe iniciar con una reducción de calorías del 10 al 15%, para evitar un déficit proteico.
El ajuste de la dieta es indispensable para ello, por lo que debe contar con una ingesta elevada de proteínas, pues es el mecanismo adecuado para ganar masa muscular de forma correcta. El consumo de carne debe estar entre 1,5 y 2 gramos por cada kilogramo de peso. Esto puede complementarse con un tipo de suplemento nutricional.
El descanso es indispensable en la recomposición, por lo que es necesario dormir todos los días 8 horas. De lo contrario, existe una tendencia al aumento de los niveles de cortisol y reducción de la testosterona, algo que no es nada positivo para la recomposición del cuerpo.