Es posible que algunos los conozcas o los hayas visto pasar; pero aun así, queremos recordarte cuáles son esos vehículos que marcaron pauta por su diseño, particulares carrocerías o la extravagancia de sus elementos. Acá te traemos los mejores autos clásicos de la historia.
Autos clásicos más famosos
Comenzamos la lista con el extraordinario Bugatti Royale de 1926, este peculiar vehículo fue merecedor de varios premios que se disputaban los vehículos más atractivos de la época. Su creador fue Ettore Bugatti, quien pensaba crear unos 25 autos de este tipo, pero debido a las circunstancias en la crisis de la Gran depresión, solo logró construir seis autos.
El ejemplar fue diseñado usando dos carrocerías; la de los autos Roadster y Cabriolet. Solo comercializaron 3 unidades y una de ellas terminó siendo adquirida por la casa Volkswagen, por unos 20 millones de euros, reseñó Esquire.
Luego se presenta el espectacular Cadillac Eldorado del año 1953, es un vehículo muy conocido a nivel mundial, aunque muy pocos conducen uno de estos autos. Algunas celebridades han hecho alarde de este modelo; desde el famoso Elvis Presley hasta la hermosa Marilyn Monroe. Su nombre está dedicado al Eldorado Country Club, donde se divertían los ejecutivos de la General Motor.
Los europeos
Sigue el icónico Mercedes 300 SL de 1954. Un vehículo que llama mucho la atención por el sistema de engranaje de sus puertas, las cuales se despliegan hacia arriba, simulando las alas de las gaviotas. Es uno de los favoritos en las casas de subastas. Solo se hicieron unas 1400 unidades de este modelo. De la versión Roadster, se estima que hubo unos 1800 vehículos fabricados.
En su momento, este fabuloso auto llegó a estar valorado en unos 7 mil euros, pero hoy día se estima que su valor supera el millón.
Por supuesto que la casa italiana Ferrari también está incluida en esta lista. Lo hace nada más y nada menos que con su Ferrari 250 Testa Rossa, del año 1957.
Recibió el apodo de “el pelirrojo”. Este auto fue diseñado para cumplir con las demandas de las carreras de 1958. Para entonces se exigía que los vehículos tuvieran un motor de 3.0 litros.
Así que Enzo Ferrari desarrolló este maravilloso deportivo V12 para competir. Su diseñador fue Aurelio Lampredi. Se fabricaron pocas unidades y la última de ellas se vendió por unos 40 millones de dólares.
Para continuar, llega un Maserati 3500 GT de 1957. Este modelo fue inspirado por la versión de calle del 350. Este auto contaba con un motor de 3,5 litros y 6 cilindros en línea, capaz de desarrollar unos 15 caballos de fuerza adicionales, debido a la inyección mecánica de combustible fósil, que le permitía alcanzar unos 220 caballos de fuerza.
