Desde su lanzamiento, el Portofino se ha sabido ganar con su elegancia incomparable la predilección de un público élite, exigente y muy detallista y refinado. Surgido a partir de la idea de convertir un reloj de bolsillo Lépine con fase lunar en un reloj de pulsera, nos trae ahora el Portofino 37 de IWC.
Portofino 37 de IWC
IWC introdujo nueve versiones con distintas combinaciones de materiales y colores de carátulas, así como unas correas muy especiales. Pero en esta oportunidad, empezando con el modelo iw458601-back, están equipados con la familia de calibre in-house 3200.
Estos mecanismos cuentan con un sistema de cuerda automática con rueda-trinquete, poseen cristal de zafiro del fondo de la caja y unos vistosos tornillos azules y rotores chapados en oro.
En las versiones con diamantes engastados, la forma de la caja ha sido modificada para alojar piedras más grandes. Estos cuentan con 72 diamantes de 1.7 mm, que suman casi 1.12 quilates en total.
Asimismo, las carátulas chapadas en plata presentan un nuevo tipo de acabado «rayos de sol» para lograr un aspecto más suave y refinado.

Brazalete o correa
Otra de las innovaciones de los Portofino Automático Fase de la Luna 37 y Portofino Automático 37, tiene que ver con un nuevo brazalete de acero inoxidable de cinco eslabones con acabados satinados y pulidos. Pero además, se encuentra la opción de la correa de piel de becerro suizo, la cual posee un código único que puede introducirse en la app de IWC para conocer el origen de la piel. Ambas se pueden intercambiar fácilmente gracias a una pequeña herramienta que se entrega con todos los relojes.