El aspecto exterior de los hombros está determinado por diferentes factores como la morfología del esqueleto en el tronco superior, por lo que, al entrenar y fortalecer los músculos de esa zona, se obtiene una forma específica, de acuerdo con la anatomía de la persona.
Si quieres comenzar a entrenar tus hombros de forma correcta, evitando posibles lesiones, debes seguir estos pasos y recomendaciones que hacen los expertos para lograr este objetivo.
Antes y después
Antes de comenzar el entrenamiento de hombros es muy importante calentar los músculos y las articulaciones para prevenir lesiones y mejorar los resultados. Calienta durante cinco minutos, asegurándote de que trabajas todos los músculos, especialmente el deltoides y el manguito rotador.
Una vez que terminas con los ejercicios, es necesario hacer estiramientos que involucren todos los rangos de movimiento como rotación, abducción y flexión. Levanta los brazos hacia adelante, súbelos y bájalos. Luego, sepáralos a los lados y levántalos hasta tocar tu cabeza con las manos.
Posteriormente, debes hacer movimientos pendulares, inclinando un poco el cuerpo. También puedes pararte derecho y levantar los hombros, haciendo círculos grandes a los lados del cuerpo.
Ejercicios de hombros que puedes practicar
Existen diferentes tipos de ejercicios que puedes realizar con frecuencia para desarrollar correctamente la musculatura de los hombros y del tronco en general. Lo más adecuado es practicarlos bajo la supervisión de un experto para garantizar que lo haces de forma correcta.
Para fortalecer tu espalda puedes hacer pull downs y remo con mancuernas; para el tronco puedes hacer elevaciones con mancuernas, flexiones, levantamiento de peso, el lat pull down o jalón al pectoral, así como los curls de bíceps, cuya sobrecarga se hace de manera paulatina y progresiva, en series sucesivas que permitan a los músculos y articulaciones acostumbrarse a la presión de cada movimiento.