¿Has probado los dumplings chinos o empanadillas chinas? Representan uno de los platos orientales más reconocido en la cocina internacional. Han ganado gran popularidad en los últimos años y lo mejor es que puedes prepararlos en casa, acompañados de los alimentos que deseas.
Se conocen como jioazi en chino, mandu en coreano, gyōza en japonés y bansh en mongol. En todas esas regiones son típicos y se consumen como una tapa, aunque también durante el desayuno, la merienda y el almuerzo. En occidente se usan comúnmente para la cena. Se pueden hacer fritos o hervidos, según tus gustos y preferencias.
¿Qué necesitas para preparar dumplings?
Los ingredientes que necesitas para la masa de los dumplings son 100 g de harina, dos tazas de agua, una cucharadita de aceite de oliva y una pizca de sal.

Pasos para su elaboración
La preparación de este alimento inicia por la masa. Para eso calienta el agua y cuando esté un poco tibia agrega la sal y la harina. Remueve hasta que se convierta en una mezcla homogénea y añade el aceite. Amasa hasta que todos los ingredientes se mezclen adecuadamente y deja reposar durante 10 minutos.
Una vez que pasa el periodo del reposo, divide la masa en 20 trozos con un tamaño parecido. Para eso utiliza un rodillo, si lo consideras necesario. Dale una forma plana y circular a cada trozo, usando harina para evitar que la masa se quede en el rodillo o en tus manos.
Después que preparas todos los discos, los colocas en la nevera, mientras preparas el relleno. Puede ser de carne de cerdo, res o pollo. Incluso, si eres vegetariano puedes hacer un estofado de vegetales como relleno.
Armado de los dumplings
Para armar los dumplings, sácalos de la nevera y extiéndelos sobre un mesón. Coloca una cucharada de relleno en cada disco, calculando una cantidad parecida para cada uno. Cuando todos están rellenos, procedes a cerrarlos, doblándolos a la mitad. Presiona los bordes con los dedos, para que la masa quede sellada.
Ahora procedes a su cocción. Si quieres hacerlos hervidos, pon a hervir agua en un cazo e introduce los dumplings y espera que hierva. Una vez que comienza la ebullición, déjalos unos diez minutos a fuego lento. Vigila que no se pase de la hora para evitar que queden demasiado blandos.
En caso de que prefieras los dumplings fritos, debes hervirlos primero para garantizar su cocción adecuada. Posteriormente, colócalos en una sartén con aceite caliente y déjalos durante uno o dos minutos. De esa manera, obtendrán una textura crujiente. Sírvelos con salsa agridulce o de soja.