Hay una nueva tendencia de yoga facial que se ha hecho popular entre hombres por sus resultados de rejuvenecimiento.
Se trata de un conjunto de técnicas y beneficios para fortalecer los músculos del rostro y dar una apariencia rejuvenecida a la piel. Todo como parte de una rutina de cuidado personal y bienestar. Además, una de sus ventajas es que se puede ajustar a las necesidades de cada individuo.
En el rostro hay 43 músculos y así como se ejercita el cuerpo para mejorar la figura, el área facial también se debe mantener joven con movimientos. Sin embargo, la rutina de cuidado no es solo con ejercicios, comprende también el uso de cremas hidratantes.

Yoga facial
El yoga es una disciplina que se practica desde hace miles de años. Nació en la india pero se ha extendido a todo el mundo como ejercicio y para reducir el estrés. Dentro de sus beneficios, mejora la salud mental, el bienestar físico y emocional. ¿Cómo lo hace? Con posturas corporales, meditación y respiración controlada.
Los signos de la edad se hacen evidentes en el rostro, como consecuencia aparecen las arrugas y la piel decae. Sin embargo, puedes dedicar algo de tiempo a los músculos faciales para revertir este proceso. No es magia ni será un efecto de cirugía estética, pero los rasgos se suavizarán.
Verás, los ejercicios de yoga para el rostro inciden en el colágeno del área, de modo que se activa la firmeza y elasticidad.
Beneficios
Practicar ejercicios para el rostro mejora la circulación sanguínea y reduce la hinchazón, con ello se minimiza la flacidez y se gana firmeza.
Como beneficio, hay una piel más tersa. En el caso de la papada, drenar los líquidos con el movimiento del rostro marcará lo pómulos y definirá el ovalo facial. De nuevo, no es milagroso, pero detiene la aparición de arrugas.

Otra ventaja de esta práctica es que reduce la flacidez en el contorno de los ojos. Asimismo, dedicar tiempo a estos músculos no toma mucho, pero debe hacerse diariamente por la mañana. Esto para activar el flujo de la sangre.
Algunos de los movimientos que puedes poner en práctica es hacer círculos concéntricos en el cuero cabelludo para que se active el riego sanguíneo. Estos se deben hacer con suavidad. Uno de los ejercicios más populares es “besar el cielo”. Para ello debes inclinar la cabeza hacia atrás y al mirar al techo dar besos, así se fortalecen los labios, mandíbula y cuello.
Otros ejercicios son el pescado, el telescopio y el tornado. Lo más importante es hacer uso regular de cremas hidratantes y protector solar.