La comida rápida se conoce como chatarra, pues es alta en grasas, calorías, azúcar y sal. Representa un mecanismo práctico para alimentarse cuando tienes poco tiempo para prepararla. Sin embargo, suelen provocar problemas de salud cuando se consume de forma recurrente.
Entre este tipo de comida se encuentran las hamburguesas, los sándwiches, la pizza, las papas fritas, la bollería, los perros calientes, alimentos ultra procesados, chocolatinas, snacks, helados, entre otros.
¿Es posible comer saludable con comida rápida?
Caer en la tentación de ir a un restaurante de comida rápida es casi inevitable. No obstante, es posible intentar comer saludable en estos lugares. Es algo que recomiendan los expertos en materia de nutrición para evitar problemas de salud a futuro.
Información nutricional de la comida rápida
Al respecto, es necesario conocer qué cantidad de calorías, sal y grasa contienen estos alimentos. Esto lo encuentras al buscar en internet o puedes preguntarlo al empleado que te atiende. Son muchos los restaurantes que te proporcionan esta información detallada.
Comer ensaladas
Hoy en día, algunos lugares de comida rápida ofrecen platos saludables como las ensaladas, las verduras y las sopas. Opta por estas alternativas y evita los aderezos o alimentos ricos en grasa, tal como el queso o los trozos de cerdo, que debes sustituir por verduras y lechuga.
Carnes magras
Cuando elijes sándwich y bocadillos, opta por aquellos que llevan carnes magras de tamaño regular o pequeño, que contienen menos grasas. No les agregues grasa o calorías como mayonesa, carne y queso. Agrega vegetales y opta por el pan integral.
Hamburguesas básicas
Si comerás hamburguesa en un lugar de comida rápida lo mejor es comprar la básica, sin queso, con carne sencilla y sin salsas. Agrega vegetales como cebolla, tomate y lechuga. Evita pedir papas fritas y la salsa de tomate, pues es un aporte elevado de azúcar y calorías.
Nivel de cocción
Elige una cocción de carne roja, pescado o pollo adecuada, por lo que es mejor la opción dorada, horneada o a la parrilla. Evita las carnes fritas o empapadas.
Sustituir postres por frutas
En vez de comer postre, que contiene mucha grasa, pide un plato de frutas simples, sin aderezos como miel o leche condensada.
Estos consejos sencillos son muy eficientes, pues te permiten aprender a comer más saludable. Además, es una forma muy práctica de disfrutar otro tipo de alimentos, cuyo sabor también es delicioso y no te provoca problemas de salud a futuro.
