Identificar lo que es una dieta suficiente, te permitirá comprender mejor todo lo relacionado con una alimentación saludable. Se relaciona directamente con la ingesta de comestibles que aporten los nutrientes necesarios para el funcionamiento adecuado del organismo.
Una dieta suficiente es indispensable para garantizar nuestro bienestar. Si es inadecuada y a ello le sumamos la inactividad física, se incrementa el riesgo de desarrollo de enfermedades metabólicas, que pueden ser graves o crónicas. He ahí la importancia de llevar un estilo de vida saludable, donde la alimentación juega un papel fundamental.
Dieta suficiente ¿Qué es exactamente?
Como dieta suficiente se conoce a la nutrición adecuada, basada en el consumo de comestibles que garantizan los nutrientes que necesita el organismo. Es una dieta equilibrada, que asegura una buena salud en general.
Ahora que sabes qué es una dieta suficiente, te contamos que, según los especialistas, es aquella que incluye todos los grupos de alimentos como carnes y pescado, leche y sus derivados, huevo, frutas, leguminosas, cereales, verduras y grasas saludables.
Porciones adecuadas a tus necesidades nutricionales
No solo basta con agregar todos los grupos de alimentos para una dieta suficiente. También es necesario ingerirlos en porciones adecuadas a las necesidades corporales.
Es por ello que los expertos sugieren consumir suficiente fibra, proveniente de los cereales integrales, las verduras y las frutas, con el objetivo de lograr un equilibrio calórico, que se refiere a gastar la misma cantidad de energía que se consume, a través de la actividad física.
Además, es de gran importancia disminuir la ingesta de grasas saturadas, que provienen de grasas sólidas o manteca. Lo más adecuado es sustituirla por las grasas insaturadas como el aceite de cártamo, de oliva o soja. También es indispensable utilizar sustitutos del azúcar, en ves de bebidas azucaradas y azúcares añadidos.
Por otra parte, es necesario reducir el consumo de sodio, que se refiere a la sal de mesa, así como consumir al menos tres comidas al día. No olvides hidratarte muy bien, tomando al menos dos litros de agua al día.